Cuando vivíamos en el segundo piso departamento 20 de la calle Carlos Tejedor, Ale y yo compartíamos habitación. Era una habitación grande, con una ventana al aire luz y otra al corazón de manzana. Un escritorio, un pizarrón grande, un placard del tamaño de una pared y una cama marinera que en un principio estaba en la pared que daba al baño.
Si bien era grande, la ventana del aire luz, no ofrecía ningún espectáculo memorable. Algunas líneas de asfalto, un rayo de sol a las 2 de la tarde entre el 4 de enero y el 17 de febrero; una vez, una rata del tamaño de un perro chico en la planta baja… mamá decía que venían de la panadería La Unión pero para mi era al revés. En fin, nada del otro mundo. En cambio gracias a ella, escuchábamos todo lo que pasaba en el edificio. El tintín metálico de los cubiertos de las otras casas a la hora de comer, algunas palabras/risas dentro de conversaciones, discusiones integras, pavas sobre el fuego, y sobre todo y mas importante la telenovela “El groncho y la dama” que mi mamá no me dejaba ver y que por suerte para mi, una vecina de oído rebelde escuchaba a todo trapo…
La otra ventana estaba en la medianera. Era pequeña como la pantalla de un televisor pequeño, y demasiado inaccesible –a unos dos metros del piso– para unos enanos como nosotros. Sin embargo un día, movimos los muebles y por obra y gracia (mucha chance tampoco había), la cama marinera fue a parar a la pared de la bendita ventana. Esta mudanza nos abrió (literalmente) una ventana a lo mejor del barrio…
Una de las maravillas era mirar la terraza del Club Sprotivo Haedo, club que frecuentábamos mi hermano y yo para hacer actividades de alcurnia… pelota a paleta, frontón, patinaje artístico sobre ruedas, judo, voley, basket, y por supuesto… pileta en verano. Y desde la ventanita mágica practicábamos un voyerismo precoz con la ayuda de unos prismáticos que tenía mi papá. Sabíamos todo lo que pasaba en la pileta. A mi me interesaban las cosas tipo si fulanito se había resbalado, si habían cambiado el agua como prometían hacerlo los lunes, si menganita había llegado y si ya se hablaba con las chicas mas grandes. A mi hermano que era un calenturiento, le interesaba saber si había ido la chica de la bikini, si había minas como las de las Radiolandias 2000 (que me mandaba a comprar a mi claro). En fin, un entretenimiento fundamental para unos niñatos como nosotros, a quienes a la hora del almuerzo y digestión del guardavidas, nos echaban del agua con aceite hirviendo.
La otra maravilla venía de la casa lindante al edificio. Era una casa tipo chorizo, bastante venida a menos pero con puertas de madera biselada, picaportes y buzón de bronce, pisos de mármol en damero… linda. En esta casa se hacían reuniones de espiritismo, y las noches de verano apenas escuchábamos un ruido, Ale y yo nos asomábamos para espiarlos. Era bastante complicado porque siendo una medianera de edificio la pared era bastante gruesa, y nosotros bastante chicos entonces teníamos que estirarnos de uno en uno mientras el otro sostenía simbólicamente las patas. Y además había que evitar a toda costa que mamá o papá nos vieran, no fuera cosa que la cama volviera a la pared del baño para siempre.
Yo era una nena de pura cepa y como tal, todo el asunto me daba bastante miedo. Pero como estaba con Ale me envalentonaba y ahogaba todo el asunto en unas risitas nerviosas. Yo creo haber visto espíritus en mas de una ocasión, es mas, de chica hasta lo hubiese jurado. Lo gracioso era hacer sonidos guturales imitando fantasmas… Yo estaba convencida de que nos creían espíritus, hasta que un día encontré un casette con grabaciones de nosotros jugando a esto y a aquello, y me di cuenta de que nuestras voces de niños no colaboraban para nada con el efecto terror que pretendíamos.
30 de enero de 2008
Ale y yo
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13 comentarios:
¿Y no te tapabas hasta la cabeza con la sabana, en pleno verano, cuando te acostabas porque tenias miedo que viniera alguien que daba miedo???
Hablando de espiritus y fantasmas... Yo si creo que vi unos, pero de verdad! No era chica y viviamos en el depto en downtown Montreal... Brrr!
Nena, que lindo que escribis :)
Ale, estoy dormidísima y me costó darme cuenta de que no eras Ale (mi hermano). Estaba... ¿y Ale cuándo vivió en Montreal? :P
Gracias!
Me imagine que te ibas a confundir... Tb con el otro comentario que hice el otro dia. Asi que me cambio a "alefunes" a partir de ahora :)
Mari: estoy leyéndole esto a Juan, y dice que se acuerda de los espiritistas de al lado. Yo me acuerdo de los ruidos que llegaban al comedor de todos los otros deptos. al tener las ventanas abiertas en verano. Concuerdo con Ale bis, qué lindo escirbís.
Mariana: Son las 0.40 hs y estamos disfrutando muchísimo de los relatos de tus locuras juveniles. Es como si estuviéramos leyendo un cuento, en el cual nos sentimos partícipes. Escribís re-lindo. Juntá anécdotas y seguí haciéndolo,
así nos gratificamos todos.
Un beso.
Vivi y Rober
El sol fue importante en ese departamento porque tambien lo recuerdo invadiendo mas y mas la pared del tragaluz del living a medida que se acercaba el verano. QUiero aclararte mari que vos sos un modelo con mas ram que el mio y alguno de tus recuerdos son noticias para mi. Ademas creo que he mezclado a mi memoria en varios cockteles cuyo reset total era la unica opcion que el sistema aceptaba
Siguiendo con el sol, recuerdo tambien la combinacion espacial que hacia con los acaros quienes desaparecian magicamente cuando entraban en la sombra y nunca supe donde iban
Con respecto a las radiolandias y mis actividades relacionadas... Un dia cuando ya viviamos en la casa de argerich pero el departamento aun era nuestro, me encontraba mirando a Nelida Lobato descansando sobre una cama que aun quedaba alli.
La de Nelida Lobato como otras fotografias recortadas justamente de las radiolandias, solian desplegarse sobre esa cama debido a que mis manos ocupadas no podian ayudar a esa tendencia tipo swinger. BUeno la cuestion es que estaba a pleno cuando senti el sonido de la llave dando golpecitos a la cerradura como queriendo entrar e instintivamente me arroje debajo de la cama en una reaccion unicamente adjudicable a un avestruz.....y a mi en esa ocasion. Me quede escondido en el tenso silencio que causaba la luz encendida, las fotos desplegadas, los pasos sobre el parquet cual pelicula de suspenso y el llamado de papa -Ale, Ale, estas?? La respuesta era obvia y yo era el unico que no la sabia.
Con respecto a las radiolandias y mis actividades relacionadas... Un dia cuando ya viviamos en la casa de argerich pero el departamento aun era nuestro, me encontraba mirando a Nelida Lobato descansando sobre una cama que aun quedaba alli.
La de Nelida Lobato como otras fotografias recortadas justamente de las radiolandias, solian desplegarse sobre esa cama debido a que mis manos ocupadas no podian ayudar a esa tendencia tipo swinger. BUeno la cuestion es que estaba a pleno cuando senti el sonido de la llave dando golpecitos a la cerradura como queriendo entrar e instintivamente me arroje debajo de la cama en una reaccion unicamente adjudicable a un avestruz.....y a mi en esa ocasion. Me quede escondido en el tenso silencio que causaba la luz encendida, las fotos desplegadas, los pasos sobre el parquet cual pelicula de suspenso y el llamado de papa -Ale, Ale, estas?? La respuesta era obvia y yo era el unico que no la sabia.
Al no ser descubierto por el agente de la kgb y escuchar el ruido de la puerta de entrada cerrarse, mis 11 anios me dijeron que me eyectara de mi escondite perfectamente exitoso y comenzara a juntar ansiosamente todas las fotos con un caracteristico ruido a papel y sobre el mismo el no tan caracteristico y risuenio ruido a risa de padre que agarra a su hijo con las manos en la masa:bue, masita para ser mas exacto.
El muy hijoputas habia cerrado la puerta y se quedo del lado de adentro igual que mi verguenza !!!!!
Luego me vengue y lo encontre con mama haciendo cosas...... como cuando comes un gajo de limon...la cascara, tuve que aprender a elaborar mis venganzas
No me pregunten por que pero una vez hice un agujero que iba del banio a nuestro cuarto...Un agujero bastante interesante que no se si tenia que ver con mis cualidades innatas arquitectonicas, voyeristas o adquiridas de psicologo
Hoy una tele se compra en cualquier gran casa de electronica. Nuestra primer tele la hizo Carlitos (empleado de papa), obvio a colores en la gama del blanco y negro, con perillas lejos de ser digitales y al cambiar de canal, cerca de sonar como una ametralladora de la serie combate, pantalla mas cerca a la concepcion de la tierra que tenemos hoy y no a la que tenian en el medioevo, y control remoto vocal accionado con sobornos del tipo si cambias de canal tal cosa o si subis el volumen tal otra.
Otros adelantos tecnologicos prematuros a la epoca fueron la colocacion de un celofan verde delante de la pantalla en la primer tv a colores que vi (otros colores que no eran blanco y negro)
Los hits del momento que se dejaban ver eran las manos magicas, centinelas del bosque, flipper, astroboy, meteoro, los 3 chiflados, la salud de nuestros hijos, buenas tardes mucho gusto...falto que tal, como estas, bien?(que nombre!!!) Kung Fu que ibamos a ver con papa cuando aun no teniamos tele a lo de una vecina que no me acuerdo el nombre, me suena delia...y un miercoles fuimos y en lugar de kung fu y en la pantalla, vimos un feretro con un monton de gente alrededor coreando un grito del corazon y yo puteando porque estuve toda la semana esperando para ver kung fu. Menuda circunstancia para recordar un momento historico de nuestro pais..
Sería Doña Mercedes? No me acuerdo tampoco el nombre...
Eso fue cuándo se murió Perón! Juer, no puedo creer que me acuerde, ya dentro de poco vamos a parecer los viejos del siglo pasado.
Estamos condenados Ale... somos del siglo pasado :(
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